Las personas son similares a las plantas. En un ambiente bueno, crecen y producen. En un ambiente negativo, no llegan a alcanzar su potencial.
Dicen que si colocas un güicoy en una jarra cuando es del tamaño de una nuez, crecerá del tamaño y forma de la jarra y nunca será más grande. Eso le puede ocurrir a la forma de pensar de una persona.
¿Cuáles son los elementos que ofrece un ambiente de crecimiento positivo en el cual tenemos más oportunidades de alcanzar nuestro potencial?
LA TIERRA ADECUADA PARA CRECER. Las plantas obtienen los nutrientes de la tierra. Las personas se nutren con ideas e información positiva que introducen a sus mentes. Eso significa aprender de lecciones como ésta. Pero también incluye leer libros, manuales y periódicos. Significa escuchar lecciones en pod casts, radio y televisión. Incluye asistir a eventos y seminarios. Mientras mejor material introduzcas en tu mente, más enriquecedora será la experiencia de aprendizaje.
EL AIRE ADECUADO PARA RESPIRAR. Las plantas no pueden vivir sin oxígeno. Tampoco las personas. ¿Cuál es el oxígeno del crecimiento personal? El propósito. Cuando sabes qué es lo que mejor haces y por qué lo haces, te sientes motivado a continuar creciendo.
EL CLIMA ADECUADO PARA VIVIR. El ambiente de una planta es impactado por su geografía. El ambiente de una persona es impactado por otras personas. El Dr. David McClelland de la Universidad de Harvard dice que las personas con las que pasas más tiempo determinan el 95 por ciento de tu éxito o fracaso en la vida. El Rey Salomón de Israel lo dijo así: “El que anda con sabios, será sabio, pero el compañero de los necios sufrirá daño.”
Por eso, busca un mentor que te ayude a crecer y busca de manera intencional, crear un ambiente positivo para otros en tu entorno.